¿A menudo te preguntas cómo cuidar de tu pelo? ¿Usas cosméticos caros, sometes a tu pelo a innumerables tratamientos en la peluquería o quizás incluso usas algún artilugio raro para estilizar? Pues resulta que puedes cuidar de tu pelo de una manera mucho más simple y que funciona. Lo único que tienes que hacer es probar los aceites capilares cosméticos. Lee el artículo siguiente y aprenderás toda la información que necesitas.
¿Cuál debería ser tu prioridad al elegir un aceite capilar? Presta atención al método de aplicación, la composición y el método de obtención de los aceites vegetales en el producto. También es muy importante elegir un cosmético acorde a la porosidad de tu pelo y a la saturación de ácidos grasos. Si quieres una nutrición y una regeneración profundas, prueba un aceite cosmético con vitaminas y minerales en la composición, así como queratina, proteínas, filtros solares, siliconas, emolientes, extractos herbales o aceites esenciales. Ten en cuenta que cuanto más natural sea la composición mejor para tu pelo. Por esta razón, intenta comprar aceites obtenidos mediante un método natural que implique la extracción mediante presión en frío. Gracias a este tipo de extracción, el aceite contiene una gran cantidad de vitaminas, ácidos grasos esenciales, minerales y otras sustancias beneficiosas. Como es de suponer, un aceite de este tipo proporcionará a tu pelo y cuero cabelludo un cuidado complejo.
¿La aplicación es también importante para ti? Si es así, elige aceites capilares que puedan aplicarse y eliminarse fácilmente mediante el lavado. Presta atención al aplicador del frasco, porque hay varios tipos: pipeta, bomba, orificios pequeños y grandes protegidos con un tapón de plástico. Antes de proceder con la compra, comprueba la consistencia. También es bastante importante debido al método de aplicación y a las propiedades del cosmético. En las droguerías hay productos disponibles en forma de spray, pero también semilíquidos o con una textura densa. Si lo que buscas es brillo y suavidad, el spray es suficiente. El resto de los aceites capilares son perfectos para nutrir y regenerar el pelo y el cuero cabelludo. Puedes usar estos cosméticos en el llamado tratamiento de lubricación capilar. Según numerosas mujeres, proporciona unos resultados increíbles. Deja el pelo bonito, regenera el cuero cabelludo, protege las puntas y mejora el aspecto general del pelo.
Si aún no sabes qué aceite es el mejor para tu pelo, familiarízate con la siguiente clasificación, en la que se presentan aceites para distintos tipos de pelo y de cuero cabelludo. Esta clasificación no hubiera sido posible sin las opiniones de las mujeres a las que se pidió que probaran algunos de estos productos. Varias decenas de participantes probaron y describieron los aceites según su acción, propiedades, métodos de aplicación e ingredientes. En las características de los cosméticos también hay algunos consejos sobre dónde se pueden comprar los aceites. Cada descripción finaliza con algunos pros y contras del producto. Tienes que comprobar qué cosmético resultará mejor en tu caso.
Al elegir un aceite capilar, es muy importante el contenido de ácidos grasos esenciales del producto. Los hay monoinsaturados, poliinsaturados y saturados. Los aceites capilares con ácidos grasos monoinsaturados contienen gran cantidad de Omega-9 y se absorben muy bien. Sus partículas son relativamente pequeñas, por lo que son recomendables para el pelo de porosidad media. Los aceites con ácidos grasos monoinsaturados son: hueso de albaricoque y melocotón, almendras dulces, aguacate y oliva. Los aceites capilares con ácidos grasos poliinsaturados tienen Omega-6 y Omega-3. Sus partículas son grandes, por lo que es más fácil que penetren en las cutículas capilares muy levantadas en el pelo de porosidad alta. Los aceites capilares con ácidos grasos poliinsaturados son: lino, cáñamo, girasol, soja y maíz. Por último, los ácidos grasos saturados penetran rápidamente en la estructura capilar y están indicados para el pelo de porosidad baja. En este grupo están las mantecas cosméticas y los aceites densos, como: aceite de coco, aceite de palma, aceite de babasú, manteca de karité, manteca de mango y manteca de cacao.
El contenido de ácidos grasos esenciales está relacionado con la porosidad capilar. Hay tipos de porosidad baja, media y alta. El pelo con porosidad baja es liso, brillante y sano, pero al mismo tiempo difícil de estilizar y de teñir. Requiere un cuidado con aceites que contengan ácidos grasos saturados (manteca cosmética con consistencia densa). El pelo de porosidad media tiene las cutículas ligeramente elevadas, está sano y es bastante fácil de estilizar. Lo ideal para este tipo de pelo son los ácidos grasos monoinsaturados. En el cuidado capilar del pelo con porosidad alta, lo mejor son los ácidos grasos poliinsaturados. Este tipo de pelo suele estar mate y seco, pero también está frecuentemente encrespado y con estática. Se dice que el pelo de porosidad alta suele ser un pelo rizado. Sin embargo, esto es algo que debes comprobar por ti misma.